Un día en la calle el niño se encontró un chicle que estaba muy sucio y se lo comió. Después se encontró con un charco enorme que tenía mucho barro y se lo echó y cuando volvió a su casa no se quería lavar. En la cena se manchó de espaguetis y su madre le tuvo que cambiar el pijama y le dijo que tuviera cuidado porque era muy sucio. El niño prometió tener más cuidado y ser más limpio.
Isabel
No hay comentarios:
Publicar un comentario