Érase una vez una tortuga que puso un huevo y a los dos días nació un bebé tortuga y era tan bonita que todos los humanos querían verla. A un niño le gustaba tanto que se la quedó y su madre estaba tan triste que se fue al agua hasta que el niño le devolvió la tortuga y se puso tan feliz que le dio hermanitos.
Claudia
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